¿Te han dicho que necesitas un puente dental y quieres saber qué es? En el artículo de hoy te lo contamos.
Un puente dental es una prótesis dental que reemplaza uno o varios dientes que faltan. Hace de «puente» entre dos o más piezas dentales, que pueden ser naturales o implantes dentales, y los huecos que han quedado tras la pérdida del diente original.
Es una estructura que se crea a partir de coronas y que se apoya sobre los dientes existentes, originales o implantes, para rellenar el vacío. De manera que el paciente recupera la estética y funcionalidad de su boca.
Para qué sirve un puente dental
El objetivo principal de un puente dental es restaurar la función masticatoria y mejorar la estética dental del paciente. Al reemplazar los dientes perdidos, el puente dental ayuda a mantener la alineación y la distribución de la fuerza en la dentadura, lo que evita problemas en la mordida y el desgaste prematuro de los dientes restantes.
Además, los puentes dentales pueden mejorar la autoestima y la confianza de las personas que han perdido dientes, ya que les devuelve la sonrisa y les permite hablar y comer con normalidad.
Ventajas de los puentes dentales
- Mejora la función masticatoria: Al reemplazar los dientes perdidos, los puentes dentales ayudan a recuperar la capacidad de masticar con comodidad y eficacia.
- Mejora la estética dental: Los puentes dentales pueden mejorar significativamente la apariencia de la sonrisa, devolviendo la armonía y la simetría a la dentadura.
- Evita problemas en la mordida: gracias a que permiten mantener la distribución adecuada de la fuerza en la dentadura, los puentes dentales ayudan a prevenir problemas en la mordida y el desgaste prematuro de los dientes restantes.
- Ayuda a prevenir la pérdida ósea: La pérdida de dientes puede provocar una disminución en la densidad ósea de la mandíbula, lo que puede tener consecuencias graves a largo plazo. Los puentes dentales pueden ayudar a prevenir esta pérdida ósea al estimular la actividad en el hueso y mantener la integridad del maxilar.
Tipos de puentes dentales
Existen dos tipos principales de puentes dentales: los puentes fijos y los puentes removibles. Y algo que tienen en común es que requieren una buena higiene bucal y una atención dental regular para mantener su durabilidad y prevenir la aparición de caries y enfermedades periodontales. Vamos a ver cada uno de ellos.
Puente dental fijo
Los puentes dentales fijos son prótesis que se adhieren permanentemente a los dientes adyacentes mediante cemento dental.
Están compuestos por uno o varios dientes artificiales y son ideales para reemplazar dientes que faltan en una sola fila.
Puente dental removible
Los puentes dentales removibles son prótesis que se pueden quitar y poner con facilidad.
Están compuestos por una estructura de metal o acrílico que se sujeta a la dentadura mediante ganchos o clips. Y son idóneos para personas que han perdido varios dientes y necesitan una prótesis que se pueda retirar para la limpieza diaria.
También son útiles como prótesis dentales temporales mientras se espera por un puente dental fijo o implantes dentales.
Si te falta uno o varios dientes y estás considerando la posibilidad de colocar un puente dental, pide cita en nuestra clínica para una evaluación detallada y un plan de tratamiento personalizado. ¡Tu sonrisa y tu salud dental lo agradecerán!
